Es una raza ovina, originaria de Castilla y León y una de las razas de ovejas más primitivas e importantes de España cuyo representante ancestral es el Ovis aries celtius. Durante mucho tiempo ha estado apartada por la fama de la oveja merina.
Con su leche se elaboran quesos de gran calidad; algunos de ellos están amparados, como el Queso Zamorano con la Denominación de Origen. Sus corderos lechales, cotizados en gastronomía, están amparados bajo la I.G.P. Lechazo de Castilla y León. El ganadero está muy atento para que las ovejas tengan tres partos a lo largo de dos años y que estos sean múltiples.
Las ovejas Churras son de animales eumétricos, de proporciones longilíneas, de caracterización sexual definida y marcada aptitud para la producción de leche -una media de 110 litros/año-.
La cabeza es de tamaño medio en armonía con el volumen corporal y totalmente desprovista de lana. Perfil fronto-nasal recto o ligeramente en las hembras, sensiblemente más acarnerado en los machos. Cara estrecha, larga con ojos a flor de cabeza. Nariz estrecha. Boca de labios finos. Orejas de longitud media insertas horizontalmente y muy movibles.
Tanto las hembras como los machos serán preferibles acornes, aunque pueden tener cuernos.
El cuello de la oveja Churra es largo, ligero, bien unido a la cabeza y tronco.
El tronco es largo y profundo. Cruz ligeramente destacada del perfil superior del tronco. Tórax plano y no muy desarrollado. Espaldas planas y bien insertadas. Línea dorso-lumbar ligeramente ascendente hacia la grupa, preferible horizontal. Vientre ligeramente voluminoso.
Grupa de la oveja churra es horizontal o poco descendida, algo más larga que ancha. Las nalgas y los muslos son musculosos, y cola de inserción baja.
Las extremidades están bien aplomadas, de longitud en armonía con el desarrollo corporal, delgada y enjuta. Pezuñas fuertes y simétricas.
Las mamas de la oveja churra están bien desarrolladas, globulosas, de igual tamaño en sus dos partes, piel fina desprovista de lana, pezones largos, simétricos moderadamente divergentes.
Los testículos de los machos son simétricos en tamaño y situación, con la piel de las bolsas totalmente desprovista de lana.
La piel es delgada para todas las regiones corporales, y en las zonas desprovistas de lana cubiertas de pelo.
La capa de la oveja churra es blanca, con pigmentación centrífuga en negro, con diseño particular de un cerco alrededor de los ojos, hocico y punta de las orejas y parte distal de las extremidades. La pigmentación de las extremidades podrá ser en forma de mancha uniforme o de pequeñas y numerosas que suben hasta las rodillas y corvejones. Es tolerable este último tipo de manchas en la cara junto con la pigmentación típica.
El vellón de la oveja churra es blanco, abierto, de mechas cónicas muy largas que cuelgan a ambos lados de la línea superior del cuerpo. El vellón recubre el tronco y deja libre la cabeza, borde inferior del cuello, axilas, vientre, bragada y extremidades. En algunos ejemplares forma copete o moña sobre la cabeza.
La fibra de lana de las ovejas de raza churra es gruesa, poco ondulada, de buena longitud.