Poner en remojo el bacalao en agua fría de 24 a 48 horas,
cambiando el agua varias veces, para que el bacalao se desale.
Lo escurrirmos y secamos con un paño. Lo pasamos por
harina y lo freimos en abundante aceite de oliva virgen extra
hasta que se dore. Rehogamos la cebolla (picada en juliana)
en un poco de aceite de oliva virgen extra, a fuego lento y
tapada. Una vez cocida la cebolla, la salpimentamos al gusto.
En
una placa de horno, colocamos la cebolla y, sobre ella los tacos
de bacalao fritos.
Agregamos la salsa de tomate y metemos en el horno (previamente
lo calentamos durante 10 minutos) a temperatura media, de 7
a 8 minutos.
A
continuación distribuimos los pimientos sobre los trozos
de bacalao, esparcimos los piñones por encima, gratinamos
y servimos en la mesa en la misma placa.
