Lo primero es desalar los lomos de bacalao y para ello los tenemos en remojo durante 24 horas antes de cocinarlos. Los cambiamos de agua unas 3 o 4 veces. Pero si los trozos de bacalao son muy gruesos hay que tenerlo desalando 36 horas. Y desalamos en la nevera.
Empezamos haciendo una fritada con todas las verduras en una cazuela. Para ello ponemos al fuego la cazuela con aceite de oliva virgen extra y vamos añadiendo la cebolla picada, dos dientes de ajo laminados, los tomates maduros pelados y quitadas las semillas y el pimiento. Una vez realizada la fritada añadimos la pulpa de los pimientos choriceros. Mezclamos todo muy bien mientras la cazuela sigue al fuego moderado. Reservamos.
A continuación o a la vez cocinamos el bacalao confitado. Para ello necesitamos un litro de aceite de oliva en una olla y la ponemos al fuego a baja temperatura (80ª C) e introducimos los lomos de bacalao y tres dientes de ajo durante 10 minutos.
Para montar el plato tenemos que mezclar la fritada con la salsa pil-pil. Ponemos los lomos de bacalao confitado y lo cubrimos con la fritada mezclada con la salsa pil-pil, decoramos con perejil picado y a comer.
