La noche anterior ponemos a remojo los garbanzos "pedrosillano" en agua templada durante 12 horas.
Ponemos una olla con agua al fuego y metemos los garbanzos, la carne magra de cerdo, la carne de ternera o zancarrón, el lacón o codillo, el trozo de costilla adobada, la oreja de cerdo, el trozo de tocino, el trozo de cecina y tres chorizos frescos. Todo esto lo tenemos cociendo a fuego mediano durante dos horas y media a tres horas. Cuando rompa a hervir y con la ayuda de una espumadera vamos quitando la espuma que vaya saliendo. Tiene que estar bien cubierto de agua (si vemos que se evapora añadimos más agua) para poder sacar el caldo para la sopa.
En una olla a parte cocemos el repollo que hemos cortado en juliana. Para ello ponemos sal y agua y cocemos el repollo durante 20 minutos. Escurrimos de agua, hacemos un sofrito con dos dientes de ajo y lo mezclamos todo y reservamos.
A continuación hacemos el relleno que es una especie de pasta que hacemos con el pan duro, el chorizo fresco, los ajos, el perejil y el tocino blanco o manteca de cerdo.
Para hacer el relleno batimos los dos huevos y añadimos las migas de pan que previamente hemos mojado con un poco de leche, el chorizo bien picado, los dos dientes de ajo bien picaditos, el perejil picado y un trocito de tocino picadito o una cucharada de manteca de cerdo. Todo lo mezclamos bien y hacemos una masa para hacer las tortitas o croquetas grandes. Que vamos a freír en una sartén con aceite de oliva. Estas tortitas o croquetas grandes las vamos a cocer con un poco de caldo del cocido durante 15 minutos.
Una vez cocida toda la carne sacamos el caldo para hacer la sopa de fideos.
Podemos comer el Cocido Lebaniego de la forma que nos apetezca. Nosotros recomendamos primero servir la sopa de fideos, a continuación los garbanzos y por último las carnes con el relleno.
Fundamental acompañar este plato típico de Cantabria con una botella de vino tinto de alguna de las Denominaciones de Origen Españolas.